BLOGOSFERA
Diputadas
Han pasado ochenta años desde que las españolas pudieron, por primera vez en nuestra historia, votar y ser votadas. Ochenta años marcados por 40 de dictadura en nuestro país que supusieron un retroceso para los tímidos avances que ya entonces estas precursoras de la igualdad entre hombres y mujeres habían logrado. Las enormes dificultades y la soledad a la que se enfrentaban en su lucha nos pueden parecer hoy propias de un tiempo remoto.
Con la llegada de la democracia hubo que empezar todo este trabajo casi desde cero. Las mujeres partíamos de una posición de total desventaja respecto a los hombres: no teníamos los mismos derechos y estábamos sometidas a la tutela de un varón para, por ejemplo, abrir una cuenta en un banco o sacar el pasaporte.
Esta semana se ha presentado el libro Diputadas. La mujer en el Parlamento de Andalucía y en la política local, autonómica y nacional, del periodista Rafael Rodríguez. Un merecido reconocimiento a las andaluzas que han luchado por la igualdad, por los derechos de la mujer desde la política y, en definitiva, por una sociedad más justa.
Hoy en día el parlamento de Andalucía es paritario y fruto de esa proporcionalidad, son muchas de las leyes y avances sociales logrados en nuestra sociedad.
Como bien decía su autor en la presentación de este recomendable libro, una vez conseguida la igualdad en el acceso a las instituciones públicas, queda pendiente la igualdad de acceso al poder económico, cada vez más decisivo en nuestras vidas. La exclusión de las mujeres sigue ligada, en gran medida, al poder, a la autoridad y al dinero.
Confío en que este objetivo se conseguirá y estoy convencida de que con mujeres al frente de grandes corporaciones o responsables de decisiones financieras, la actual voracidad de los mercados será un viejo recuerdo del pasado que, sin embargo, nunca debemos ni podemos olvidar.