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Guadalmedina: solución verde, abierta y de espacio público
Estos días la ciudad ha recuperado el debate sobre el futuro del río Guadalmedina a su paso por la ciudad y nada más empezar hemos descubierto que existen dos alternativas, que no son técnicas, sino ideológicas, de modelos de ciudad.
La primera, la de siempre. Francisco de la Torre propone embovedar el río, con más cemento, e incluso habla de poner más carriles de tráfico ¡y hasta un parking! ¿os suena?.
Este ayuntamiento no se ha preocupado por el presente del río, lo ha abandonado a su suerte: ahí están los malos olores en la desembocadura que denuncian los vecinos, y los carros de supermercado, y los colchones... No les ha interesado que estuviera bonito. Ese es el presente, y para el futuro busca una solución del pasado: embovedarlo, o sea, enterrarlo.
Las ciudades no podemos pensarlas únicamente como más hormigón, sino que deben presidirlas tres ideas: habitabilidad, disfrute y sostenibilidad, lo que nos agradecerán no sólo los actuales habitantes, sino también nuestros hijos, por haber sabido pensar adecuadamente en su futuro.
Con el Guadalmedina, yo creo que debemos apostar por una solución verde, abierta y de espacio público, que permita el disfrute de los malagueños y que se convierta en un espacio más de ocio para todos nosotros, en un pulmón necesario.
Hoy he expuesto mi propuesta, que es una solución verde frente a la gris de más cemento. Habría que convocar un concurso de ideas que analice y que concrete posibles proyectos y habría que contar también con un gran proceso de participación ciudadana. En este sentido, es necesario el mayor consenso ciudadano y he abogado también que éste se alcance en el seno de la Fundación Ciedes, en la que participan las principales administraciones y organizaciones sociales.
Mi modelo de ciudad, nuestro modelo de ciudad como progresistas, no es acosar ni acotar los montes con más viviendas, sino tenerlos libres y disfrutarlos para los ciudadanos, y no es embovedar los ríos, sino aprovechar los recursos de que disponemos para el disfrute ciudadano, como paseo, como ocio, como deporte. Hay muchas alternativas que se deben abordar con creatividad, con imaginación, y sobre todo con sostenibilidad y seguridad, este último elemento es fundamental.
Invito a todos a presentar sus ideas sobre el futuro del cauce al pie de este post, en el espacio de propuestas de este blog .