El PSOE pide al Ayuntamiento “mayor ambición” para la defensa del colectivo LGBTIQ+
Los socialistas plantean al equipo de gobierno, en coordinación con el Consejo Sectorial, “mayores recursos para desarrollar el I Plan Municipal de Diversidad Sexual, Familiar y de Género”, además de la creación de un procedimiento municipal para promover gestos de condena institucional en el caso de agresiones por odio, puesto que a día de hoy no existe esta figura para condenar atentados de esta índole
El portavoz socialista, Daniel Pérez, ha pedido al Ayuntamiento de Málaga “mayor implicación y ambición para dotar de recursos a la puesta en marcha del I Plan Municipal de Diversidad Sexual, Familiar y de Género”, dirigido a la protección y asistencia del colectivo LGBTIQ+, además de “aislar los discursos de odio de otros partidos, como Vox”, condenando todas las acciones de discriminación realizados desde las instituciones donde estos grupos tienen representación.
“Se ha normalizado los discursos de odio por las manifestaciones vertidas por grupos políticos que ahora tienen cabida en nuestras instituciones y uno de ellos, Vox, sostiene el gobierno de Juanma Moreno en la Junta de Andalucía”, ha agregado Daniel Pérez. “Por este blanqueo de pensamiento ultraderechista, se da pie a la ola de violencia contra personas gays, lesbianas, personas trans, bisexuales, intersexuales y otras personas diversas visibilizados espacialmente durante estos días. Los responsables políticos debemos luchar contra la intolerancia y el odio de la extrema derecha en instituciones, medios de comunicación y redes sociales. La neutralidad, aquí no vale”, ha defendido el portavoz socialista.
Así lo ha manifestado el líder socialista, que ha presentado una moción del grupo en compañía del concejal Pablo Orellana. Pérez ha pedido además que el propio Ayuntamiento elabore, en colaboración con el Consejo Sectorial LGBTI, “un procedimiento para activar gestos de condena institucional por parte del Consistorio de las agresiones graves por motivos de LGBTIfobia que tengan lugar en nuestra ciudad”. De hecho, días después del asesinato de Samuel Liz, por motivos supuestamente relacionados por su orientación sexual, aún no ha habido gesto de condena “porque falta en nuestro ayuntamiento el cauce directo para que, con el consenso de todos los grupos, estos atentados se puedan condenar cuanto antes”. Este joven gallego, que fue asesinado tras recibir una paliza mortal en A Coruña a grito de ‘maricón’, “ha puesto de nuevo el foco en un problema que muchos ya creían superado: la violencia contra el colectivo de gays, lesbianas, personas trans, bisexuales, intersexuales y otras diversidades”.
Por su parte, el concejal socialista Pablo Orellana ha pedido al Ayuntamiento “que ponga la concienciación y la educación en valores en la cima de sus acciones, porque el respeto a la diversidad hay que aprenderlo prácticamente desde la cuna”. Así, propone al equipo de gobierno “la realización de una campaña municipal específica de sensibilización y educación contra los delitos de odio en colaboración con el Consejo Sectorial LGBTI. También, propone la elaboración de “un curso de formación específico en delitos de odio y en diversidad sexual y de género para para funcionarios y policía local del Ayuntamiento”.
Para Orellana, “el asesinato de Samuel Luiz no ha sido un hecho aislado, no ha sido un hecho puntual. Lamentablemente las agresiones por LGTBIfobia han marcado el mes del Orgullo en España que, a pesar de ser uno de los países más tolerantes respecto a la orientación sexual. Y no solo durante el mes del Orgullo, según apuntan varios índices, los delitos de odio y LGBTIfobia han estado experimentando un repunte en los últimos años”. El edil del PSOE ha recordado que “en nuestra ciudad se han viralizado en redes sociales casos como el de Jesús y su marido, vecinos de Teatinos, que recibieron en su buzón un mensaje homófobo”. En Madrid, Javier Ruescas denunció la agresión a su novio por parte de un agente de la Policía Municipal, además de la agresión sufrida en Palma por un joven a manos de su padre y de su hermano. “Esta serie de agresiones contra personas LGTBIQ+ en España demuestra que el odio y la fobia contra este colectivo no cesa. No solo no cesa, sino que va en aumento”.
“Esta tendencia al alza de las agresiones LGTBIfóbicas coincide en el tiempo con la irrupción de Vox en la vida política”. Si bien el edil no considera a este grupo “causante directo de las agresiones, sí que enardecen a quien piensa que gays, lesbianas, personas trans, bisexuales, intersexuales y otras personas diversas no deben tener los mismos derechos que el resto. Nos ha costado 20 años alcanzar un mínimo consenso en materia LGTBIQ+, consenso que estamos perdiendo porque mientras en otros países a estos discursos se les pone líneas rojas, pero aquí, al contrario, se les ponen alfombras rojas, normalizan y se blanquean por llegar a pactos con para conseguir gobernar, como es el caso de Andalucía”.
Miedo y pudor a darse la mano en público
El informe ‘Evolución de los delitos de odio en España’ del Ministerio de Interior arroja que las agresiones LGTBIfóbicas denunciadas han alcanzado las 278 en 2019, el nivel más alto de los últimos cinco años. “Sin embargo, distintos observatorios manifiestan que las denuncias registradas son solo la punta del iceberg. Hay muchos ataques que no se denuncian. En 2019, el Observatorio contra la Homofobia de Barcelona destacó que el 71,3 % de los conflictos no se denunciaban por ninguna vía oficial. Un hecho que atribuía a factores como la desconfianza en las autoridades o la falta de acompañamiento social y familiar”, ha apuntado el concejal socialista. Según una macro encuesta realizada por La Agencia de Derechos Fundamentales de la UE en 2019, un tercio de las personas LGTBIQ+ en España no va a algunos lugares por miedo y la mitad de quienes tienen pareja evita darse la mano en público.
La Declaración Universal de Derechos Humanos dice que “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos”. Necesitamos una sociedad concienciada con los derechos humanos, que vele por la libertad de cada una y cada uno de ser tal y como somos. Una sociedad educada en respeto y tolerancia, comprometida para que ese tiempo que se nos ha robado a los que hemos decidido ser y amar libres no se les hurte a las nuevas generaciones. “Para ello, hacen falta políticas valientes que erradiquen la desigualdad y la discriminación desde la base, desde la educación y basadas el respeto a todas las orientaciones sexuales y expresiones de género”, ha zanjado el edil socialista.