El PSOE solicita a la Diputación un estudio sobre la situación de las mujeres víctimas de violencia de género en el mundo rural
Los socialistas instan a la institución provincial a rechazar cualquier posicionamiento político que propugne la negación de la existencia de la violencia machista
El PSOE ha solicitado a la Diputación de Málaga la realización de un estudio provincial pormenorizado sobre la situación de las mujeres víctimas de violencia de género en el mundo rural. Así se recoge en una moción presentada por los socialistas a la comisión de asuntos de ciudadanía de la institución provincial que se debatirá la próxima semana.
A través de esta iniciativa, los socialistas también han instado al equipo de gobierno de la Diputación a impulsar campañas de información, prevención y sensibilización en materia de violencia machista teniendo en cuenta las características de las mujeres que viven en el mundo rural; a impulsar y difundir un catálogo de buenas prácticas en el ámbito rural del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, así como seguir impulsando el análisis e investigación de la situación de las mujeres en el mundo rural y la lucha contra la violencia de género y a expresar el rechazo a cualquier posicionamiento político que propugne la negación de la existencia de la violencia de género o rechace la validez de las políticas públicas enfocadas a su total erradicación.
La diputada provincial del PSOE, Irene Díaz, ha defendido que el Pacto de Estado contra la Violencia de Género “es la mejor herramienta para luchar contra esta lacra social y estructural, con medidas en todos los sectores dirigidas especialmente a aquellos colectivos de mujeres más vulnerables, entre ellos el ámbito rural”. En este sentido, ha recordado que la medida 189 del Pacto de Estado contra la Violencia de Género prevé la realización de un estudio sobre la situación de las mujeres víctimas de violencia de género en el mundo rural para analizar todas las actuaciones que rodean a las víctimas.
El 18 de octubre de 2020, la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género y la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (FADEMUR) presentaban la publicación del estudio que daba cumplimiento a este compromiso. Este estudio se realizó en siete comunidades autónomas, elegidas por su ruralidad y dispersión, y en municipios de hasta 20.000 habitantes. La investigación ha contado con un total de 167 encuestas a mujeres, 333 encuestas a agentes sociales y profesionales y 23 entrevistas en profundidad a mujeres víctimas y usuarias de diversos servicios de atención a víctimas (servicios sociales, sanitarios, y otros de atención a la mujer).
El estudio proporciona una fotografía de un medio rural en el que perduran de forma notable la desigualdad de género, los roles sexistas tradicionales y la violencia contra las mujeres. Entre las conclusiones del estudio destacan la larga duración de las situaciones de maltrato y la percepción social de que la violencia de género es todavía una cuestión del ámbito familiar y privado. Motivos como la dependencia económica, el miedo a ser juzgadas por su entorno, el desconocimiento de los recursos de protección y atención, la dificultad para acceder a los recursos o la desconfianza hacia la efectividad de los mismos explican que las víctimas en el ámbito rural hayan sufrido relaciones de maltrato durante una media de 20 años.
“El maltrato se ensaña con mayor dureza con las mujeres “del campo”, que tienen menos medios específicos para encararlo. Además, la responsabilidad ciudadana frente a la violencia es distinta en el ámbito rural que en las ciudades, en los pueblos todo el mundo se conoce y tienen relaciones de cercanía cuando no resultan directamente familiares. Este control social afecta directamente a las víctimas y dificulta los procesos de ruptura del silencio de las víctimas”, ha explicado la diputada provincial.
“En el ámbito rural, y debido a la escasez de recursos, es especialmente importante la coordinación entre las diferentes administraciones públicas, las entidades del tercer sector y las asociaciones que trabajan con las víctimas de violencia de género y sus hijas e hijos, así como las redes de apoyos informales ya que son las entidades más cercanas a las mujeres que ante situaciones de peligro o riesgo pueden actuar con mayor inmediatez”, ha expuesto Díaz, que ha insistido en la necesidad de que la Diputación redoble sus esfuerzos en la lucha contra la violencia de género en el ámbito rural.