El PP "boicotea" medidas presentadas en el Parlamento Europeo por el PSOE
La secretaria de Igualdad del PSOE malagueño, Meli Galarza, ha asegurado que el Partido Popular Europeo (PPE) "ha boicoteado" todas las medidas presentadas en el Parlamento europeo que suponían un avance en materia de igualdad.
"El PP ha estado en contra de la supresión de la discriminación de las trabajadoras de la industria; de una presencia equilibrada de hombres y mujeres en los consejos de administración de las empresas, en los comités de selección y de evaluación y en cualquier órgano de decisión; de las campañas de sensibilización sobre la desigualdad salarial y laboral; de la aplicación del principio de igualdad de remuneración a las becas y ayudas o de ejercer el control para evitar los mensajes sexistas en la publicidad", enumeró Galarza a través de un comunicado.
En este sentido, aseguró que "los socialistas, creemos en la igualdad entre hombres y mujeres en oportunidades, salarios, reconocimiento, en términos de liderazgo y representación en todos los campos y actividades".
Según la responsable de Igualdad de los socialistas malagueños, los conservadores "se han negado a votar" la Directiva sobre la aplicación de medidas para promover la mejora de la seguridad y de la salud en el trabajo de la empleada embarazada, que haya dado a luz o en periodo de lactancia, donde se incluía la prohibición del despido de la trabajadora entre el inicio del embarazo hasta seis meses después de haber disfrutado del permiso de maternidad.
Asimismo, "se han posicionado en contra de aprobar la extensión de la baja por maternidad hasta un mínimo 20 semanas y no han querido instaurar un permiso de paternidad de 2 semanas, para el conjunto de los países de la UE, así como fijar una cuota femenina en los consejos de administración de las empresas industriales europeas".
"Una de las razones que más peso ha tenido para que la Directiva de las 65 horas no saliese adelante en el Parlamento europeo fue precisamente que trabajando 13 horas diarias, es decir desde las 8 de la mañana hasta las 9 de la noche, no nos sería posible ocuparnos de nuestras familias", explicó Galarza, que criticó que la derecha europea "quería que trabajásemos 65 horas semanales y no estaba teniendo en cuenta la prioridad que es y debe ser la familia"