BLOGOSFERA
El mismo PP de Bárcenas, Casado, Moreno Bonilla y toda la cuadrilla
Nada parece haber cambiado en el PP, vuelven a salir a la palestra los años en los que tanto Bárcenas como Moreno Bonilla se debían a un mismo PP. El primero por haberse convertido en gerente y luego tesorero durante casi 20 años; el segundo porque, precisamente en esa última etapa, la más oscura de este partido, aparecía como flamante diputado en sus inicios por Cantabria y receptor de hasta 600.000 euros en "complementos". Así es como él mismo los definió para lo que otros vieron como sobresueldos.
Es precisamente en esa etapa donde Bárcenas y Bonilla, Bonilla y Bárcenas, cruzaron sus caminos y quizá algún despacho en la calle Génova, por eso no es de extrañar que, primero como presidente del PP andaluz y luego como presidente de la Junta de Andalucía, Moreno Bonilla haya querido tener cerca a fieles colaboradores dentro de un partido en el que todo sigue oliendo mal, pero que muy mal. Probablemente con mucho empeño para que se intente olvidar los momentos en los que él aparecía junto al lado de otra pieza quemada por la Gürtel, Javier Arenas, ahora persona non-grata para el PP de Casado, que sigue intentando que todos atiendan al mantra de "esto es un complot contra nosotros".
Vemos, por tanto, en ese papel de fiel colaborador al actual consejero de Presidencia y también presidente del PP malagueño, Elías Bendodo, el PP malagueño de Ricardo Galeote o el de las obras de la sede provincial de este partido. Unas obras realizadas con unos fondos de los que todavía no conocemos su procedencia pero que fueron inauguradas por el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
Y en medio de este proceso judicial y en medio de una crisis mundial, sigue asaltando una duda: ¿qué están haciendo Moreno Bonilla o Bendodo por los malagueños y malagueñas, por los andaluces y andaluzas?. Tenemos la obligación de hacernos esta pregunta ante quienes tienen las máximas responsabilidades ejecutivas en el gobierno de la Junta, sobre todo cuando han estado tan cerca de los protagonistas de una de las principales tramas de corrupción política de Europa.
Sustentado por un PP en el que la corrupción se instaló de tal forma que no ha hecho otra cosa que corroerlo por dentro y en el que, incluso, expresiones como "M. Rajoy" aparecían en los papeles de Bárcenas sobre la denominada "caja B", el gobierno de la Junta está paralizado e intentando vivir del márketing y la propaganda.
Porque si miramos la forma en la que han tratado a los servicios públicos, con o sin pandemia de por medio, solo encontramos recortes en sanidad, educación o dependencia.
Porque si nos fijamos en esas partidas de millones que supuestamente vienen a inundar la provincia de Málaga, solo descubrimos la caída de las inversiones mientras la economía de la provincia, en especial la hostelería y la restauración, sufren del olvido de un presidente malagueño.
Porque si preguntamos sobre qué es lo que están haciendo realmente por Andalucía, solo obtenemos el sonido de los silbidos que en ciudades como Linares censuran la nula capacidad de Moreno Bonilla para generar empleo. Bueno, para generar empleo entre los andaluces de a pie, porque para aumentar la plantilla de cargos de confianza en la estructura directiva de la Junta ya lo hacen vía BOJA.
El gobierno de PP y C's en la Junta es un juguete roto cuyo único pegamento está siendo decir sí a todo lo que sale desde los postulados de sus aliados de la extrema-derecha, Vox.
Por desgracia, esa falta de iniciativa para acometer con seriedad los problemas que tiene esta provincia y esta región la seguiremos padeciendo la ciudadanía andaluza y malagueña. Y la seguiremos sufriendo mientras vemos como el tejido económico de la provincia se desangra.
Sin embargo, tanto Moreno Bonilla como Bendodo seguirán intentando deslumbrarnos con todos los fuegos de artificio posibles. Una suerte de malabarismo y pirotecnia en la que tendrán que poner mucho esfuerzo para que no se siga hablando de la trama Gürtel. Quizás, o eso nos dirán, sea todo imaginación nuestra.