BLOGOSFERA
El pipican sobre las fosas
Esta es la historia de los restos de 1.079 personas que hace 80 años fueron asesinados por defender la libertad y la constitución española de 1931. Estas víctimas de la represión de la dictadura franquista halladas en el sector 8 del cementerio de San Rafael, fueron apiladas en 21 pequeñas fosas en diferentes capas, muertos sobre muertos. Las evidencias arqueológicas señalaban a que en este sector 8 fueron depositados las personas encarceladas por sus ideas y que estuvieron confinadas en los diferentes campos de concentración que el franquismo habilitó por Málaga, desde Torremolinos hasta la avenida de la Aurora, pasando por la prisión provincial de Málaga o la actual comisaría de la Rosaleda, habilitada para acoger a las mujeres rojas y sus hijos.
Entre esas 1.079 víctimas de la barbarie, del odio y la sinrazón, se encontraron los restos de 126 niños y niñas, fallecidos en los primeros años de aquella posguerra, marcada por las enfermedades, el hambre y la miseria. Esas fosas abiertas para los asesinados republicanos sirvieron para acoger aquella mortandad de menores de edad desnutridos de las familias malagueñas.
Tras permanecer 70 años olvidados por las administraciones San Rafael, fue la Asociación contra el Silencio y el Olvido por la Recuperación de la Memoria Histórica quien trabajó y consiguió que este espacio fuera declarado Lugar de Memoria por la Junta de Andalucía, al ser la mayor fosa común de España con 4.500 personas enterradas. Además, el sector 8 con 21 pequeñas fosas que alberga el 38% de todas las personas vilmente asesinadas por sus ideas, no merece que Francisco de la Torre, su Alcalde ponga un pipican, un cagadero de perros, sobre la fosa en la que esperaron que la democracia española recuperara su memoria, hicieran justicia con ellos y los trataran con dignidad.
Señores del PP, hay que tener un poco de respeto por quienes dieron la vida por nuestra democracia.