Daniel Pérez: “Málaga no puede ser solo para turistas y especuladores”
“Málaga está perdiendo su alma porque quienes la construyen ya no pueden vivir en ella”, asevera el portavoz tras conocerse un informe del propio funcionario de Turismo que advierte de la saturación que está sufriendo la ciudad, un modelo que no solo expulsa a los vecinos del centro, sino que amenaza con extenderse a los barrios
“Lo que no queremos para el centro, tampoco lo queremos para nuestras barriadas. No podemos permitir que el turismo de borrachera, el ruido y la masificación se instalen en nuestros barrios”
El Grupo Municipal Socialista ha presentado una moción urgente en el Pleno del Ayuntamiento de Málaga para exigir medidas inmediatas que frenen la saturación turística, la crisis de vivienda y la especulación inmobiliaria que están expulsando a miles de malagueños de su propia ciudad. “No podemos seguir mirando hacia otro lado mientras Málaga se convierte en un parque temático donde los vecinos ya no tienen sitio”, ha denunciado Daniel Pérez, portavoz del PSOE en el Ayuntamiento.
El edil socialista ha sido contundente al señalar que la ciudad está sufriendo una transformación que deja atrás a quienes la habitan. “El centro histórico ya no es un barrio, es un decorado. Se han sustituido los hogares por apartamentos turísticos y los comercios tradicionales por franquicias pensadas para el visitante. Esto no es progreso, es un despojo”, ha criticado. Según los datos expuestos en la moción, en 2024 Málaga recibió 1,99 millones de visitantes con 4,76 millones de pernoctaciones, mientras que las viviendas de uso turístico superan ya las 13.000, alcanzando en algunos barrios como la Plaza de la Merced un 53% del total de pisos.
El propio funcionario responsable del área de Turismo del Ayuntamiento ha advertido en un informe que la ciudad está al límite de su capacidad y que el modelo actual no es sostenible. “No lo decimos solo nosotros, lo dicen los datos y lo dice el propio Ayuntamiento: Málaga está saturada, y sin control, este problema se extenderá a los barrios. Lo que no queremos para el centro, tampoco lo queremos para La Trinidad, El Palo o Cruz de Humilladero. No vamos a permitir que el turismo de borrachera, los pisos turísticos descontrolados y el ruido se trasladen a nuestras barriadas”, ha alertado el líder de los socialistas en Málaga.
“Cada nuevo apartamento turístico sin control es una familia malagueña más que se ve obligada a marcharse”, ha subrayado el dirigente socialista. “La vivienda se ha convertido en un bien de lujo cuando debería ser un derecho. ¿Cómo puede ser que una pareja joven o un jubilado no puedan vivir en la ciudad en la que han nacido? Esto es un fracaso absoluto del modelo de ciudad que defiende el equipo de gobierno”, ha criticado. En la última década, el precio de la vivienda en Málaga ha subido un 107%, con alquileres que han aumentado un 12% solo en el último año, alcanzando los 15 euros por metro cuadrado. “La consecuencia es evidente: 35.000 malagueños han tenido que abandonar la ciudad porque no pueden permitirse vivir aquí”, ha señalado el edil.
El concejal socialista ha recordado testimonios como el de Carmen, una jubilada expulsada de su casa tras 40 años porque su edificio fue reconvertido en apartamentos turísticos. “Esta vecina tuvo que irse a Torremolinos porque no encontraba nada asequible en Málaga. Es una historia más de muchas, y cada una de ellas nos dice lo mismo: nos están echando de nuestra propia ciudad”, ha lamentado Pérez. También ha expuesto el caso de María y José, una pareja joven con dos hijos que se vio obligada a trasladarse a un municipio a 30 kilómetros de Málaga por no poder asumir el precio del alquiler. “Se han convertido en exiliados dentro de su propia tierra. Sus trabajos están aquí, pero Málaga ya no es un lugar donde puedan vivir”, ha denunciado el portavoz socialista.