BLOGOSFERA
El asalto político a Marbella
"El PSOE inicia el asalto político de la alcaldía de Marbella". Así titulaba a nivel provincial un medio de comunicación sobre el cónclave de los socialistas malagueños que se celebró en Marbella el pasado sábado día 7 de febrero.
Arropado por mis compañeros y compañeras, y con el honor de haber sido elegido por ellos presidente del comité, celebramos un encuentro donde nos comprometimos a recuperar los gobiernos en la provincia de Málaga y en Marbella. Estoy convencido de ello, ahora más que nunca.
Os dejo mi intervención en la apertura del comité:
En primer lugar quiero daros la bienvenida a mi casa, a Marbella, una ciudad acogedora y amable, y pese a todo lo que ha pasado en ella, una ciudad abierta y de gente trabajadora y luchadora.
Hoy estamos aquí para debatir, para aportar propuestas a nuestro partido y analizar donde estamos. Y no podemos analizar dónde estamos sin contextualizar, sin hacer mención a todo eso que nos rodea y que nos afecta.
Vivimos unos tiempos convulsos y difíciles. La crisis golpea gravemente a los más débiles, y por ello debemos estar con los que más dificultades están pasando.
Y aquí quiero destacar una realidad de la que ha de tener conocimiento los ciudadanos para saber el esfuerzo de las políticas sociales del PSOE: Mientras Andalucía pone en marcha medidas de protección para los más necesitados, el Gobierno de Rajoy sigue asfixiando a los andaluces privándonos de 5.000 millones de euros que nos corresponde por ley en los últimos tres año.
El decreto de exclusión, impulsado por la presidenta Susana Díaz es un ejemplo de preocupación por la ciudadanía, por aquellos más necesitados. Un ejemplo de lo que hay que hacer en tiempos difíciles.
No tenemos baritas mágicas, pero sí tenemos el compromiso de estar al lado de los ciudadanos, y de entro ellos, de los más débiles. Nos duele que haya familias sin ingresos, y actuamos. Nos duele que haya niños que no pueden alimentarse bien, y actuamos. Nos duele que echen de sus casas a familias enteras, y actuamos.
En Andalucía, aunque le moleste al PP sabemos hacer las cosas, apostamos por un crecimiento sostenible donde tiene cabida la construcción, como recientemente anunció Susana Díaz en las jornadas de urbanismo celebradas aquí en Marbella. Apostamos por la inversión y la sostenibilidad en la construcción frente a la especulación urbanística del Partido Popular. Y el que la presidenta lo anunciara en Marbella no fue casualidad.
Apostamos por la libertad de las mujeres para decidir sobre su maternidad, y apostamos porque nadie, ningún joven que quiera estudiar, deje de hacerlo porque su familia no tiene recursos.
La provincia de Málaga no es ajena a las políticas discriminatorias del PP. A los recortes sociales y subidas de impuestos de Rajoy hay que sumarle la injusticia fiscal de malos gobernantes, como Elías Bedodo con el IBI en la provincia, o el estridente ridículo que De la Torre ha hecho en Málaga con la facturación del agua que, como siempre, terminará pagando los más frágiles del sistema.
Una derecha malagueña cargada de prepotencia tan cínica que son capaces de presentar un código ético mientras mantienen un alcalde en Benaoján que ladra y fuma en los plenos o montan un escrache a la presidenta de Andalucía manchando la imagen internacional de nuestra tierra en el aniversario del Museo Picasso.
Frente a ellos, los socialistas malagueños, con humildad, cargados de convicciones y con la insistencia constante de trabajar con un solo objetivo: El empleo. El Trabajo. La preocupación principal de nuestros vecinos.
En Marbella, nos hemos convertido en la alternativa cercana y solvente. Un gobierno eficaz y eficiente que haga de Marbella y San Pedro la gran ciudad que merece ser. Una alternativa social y de futuro que lidere los proyectos que el PP tiene estancados, entre ellos la obra de ampliación del puerto de La Bajadilla que tres años después de su anuncio ni hay ampliación, ni jeque, ni proyecto, ni absolutamente nada. Sólo el álbum de fotos de una alcaldesa de bodas, bautizos y comuniones.
También quiero en esta intervención reconocer el poder de la ciudadanía en mi ciudad. Todos juntos, partidos políticos y ciudadanos hemos derribado el proyecto de los rascacielos de 50 plantas que el PP no se ha atrevido a construir.
Pero nuestra principal preocupación, que será nuestra primera ocupación cuando estemos gobernando son los más de 17.000 desempleados que existen en nuestra ciudad. 8.500 familias con todos los miembros en paro. 2.500 hogares donde ningún miembro tiene ingresos. Esto es el gran drama al que hay que buscar solución.
Y la solución quizá pasa por recuperar para Marbella y San Pedro aquello que nos robaron y que nos pertenecen, y que el PP en estos momentos está impidiendo que venga a Marbella. Me refiero a las multas de los casos de corrupción, más de 800 millones de euros en total. Desde el PSOE hemos solicitado que lo que se recupere revierta en la ciudad en planes de empleos, de dotaciones y de promoción. Y el PP ha dicho no, rechazándolo en el ayuntamiento y votándolo en contra en el Senado.
Y no solo hay que resarcir a Marbella en lo económico, también debe hacerse en lo moral y en lo ético. El ayuntamiento es la única acusación que no ha recurrido la sentencia del Malaya y eso, un pueblo que fue saqueado ni lo comparte ni lo entiende, como tampoco entienden que la alcaldesa ha rechazado hasta en tres ocasiones una declaración institucional en contra del indulto a José María del Nido. Con esto el PP se ha situado al lado de los delincuentes y en contra de los intereses de los ciudadanos.
Por eso hablo de la necesidad de un gobierno socialista en Marbella que ponga fin de forma definitiva al gilismo, que se sitúe frente a los delincuentes, que atendamos los intereses de los ciudadanos y que construyamos el futuro junto a los marbelleros y sanpedreños.
Gracias a todas y todos.